La frugalidad es un término cada vez más en boca de todos y nosotros no vamos a ser menos 🙂 Y es que si tu meta es alcanzar la libertad financiera, desarrollar la cualidad de la frugalidad puede marcar un antes y un después en tu futuro financiero. El tiempo que te lleve alcanzar tus metas dependerá de tu frugalidad en el uso de tus recursos económicos.

En este artículo analizaremos en qué consiste ser frugal, como puede ayudarte a alcanzar tus objetivos y como incorporarlo a tu estilo de vida.

¿Qué significa ser frugal?

De acuerdo con la Real Academia de la lengua Española (RAE), la frugalidad significa «templanza, parquedad en la comida y la bebida

La parquedad significa «moderación económica y prudente en el uso de las cosas» y «moderación, sobriedad«.

Al leer estas definiciones vemos claramente como están relacionadas con las finanzas. Muchas personas al pensar en la frugalidad lo relacionan falsamente con la austeridad y no es así.

Desarrollar la cualidad de la frugalidad implica sacar el máximo partido de nuestras finanzas. Consiste en ser capaz de que una moneda en tu bolsillo valga más que en el de otro.

De esta manera podremos ahorrar más, ahorrar mejor y podremos alcanzar nuestras metas financieras mucho antes de lo que imaginamos.

¿Cómo puede ser frugal ayudarte para el futuro?

Sin importar donde te encuentres en tu camino hacia la libertad financiera, desarrollar la frugalidad puede ser clave para alcanzar tus metas financieras.

Una persona frugal hace de utiliza sus ahorros de la manera más eficiente posible por lo que es capaz de ahorrar más y gastar menos, potenciando exactamente la herramienta más importante para crear riqueza: tus ingresos.

Al aumentar esa capacidad de ahorro, podrás utilizarlo para invertir y por medio del interés compuesto, obtener grandes rentabilidades y alcanzar rápidamente a tus metas.

Además de ser una cualidad que puede ayudarte alcanzar tus metas, el vivir de manera frugal, puede ayudarte incluso después de haber alcanzado tus metas. Muchas personas con éxito en las finanzas poseen esta cualidad. No derrochan sus ahorros sino que sacan el mayor partido de ellos, son generosos con otros y entienden que la frugalidad no es un medio para un fin, sino un estilo de vida.

El vivir de una manera frugal, puede protegerte frente a la inflación del estilo de vida. Este efecto ocurre cuando los individuos o familias que están acostumbrados a vivir con unos ingresos y un estilo de vida determinados, obtienen mayores ingresos.

Entonces, su estilo de vida cambia de manera que gastan más de acuerdo con sus posibilidades pero su capacidad de ahorro prácticamente se mantiene igual que antes de obtener mayores ingresos.

Cuando vivimos de manera frugal no se pierde de vista los objetivos financieros y se utilizan los recursos disponibles de manera eficiente. Eso no significa que no pueda haber lugar para disfrutar de los frutos de tus esfuerzos, por supuesto que sí. Pero esos gastos se hacen utilizando la razón y no dejándose llevar por la inflación del estilo de vida.

¿Por dónde empiezo?

Convertirte en una persona frugal no ocurre de la noche a la mañana pero el cambiar pequeños hábitos pueden tener un impacto en ti y ayudarte a desarrollar esta cualidad y que se forje en tu carácter.

Es una cualidad que he desarrollado y que aún sigo desarrollando en mi propia vida y que ha cambiado mi manera de ver las cosas. A continuación vamos a ver los siguientes pasos que puedes dar para vivir de manera más frugal:

1. Lleva un registro de tus ingresos y gastos

Este es quizás el primer hábito más importante para alcanzar tus metas financieras y también para desarrollar esta cualidad.

Necesitas ser consciente de cuanto dinero entra y sale de tu bolsillo cada mes. Cuanto más exacto sea mejor. Únicamente al anotar todos tus ingresos y gastos por pequeños o grandes que sean, podrás tomar decisiones adecuadas a tus metas y circustancias.

Muchas personas no son conscientes de como se encuentran financieramente. De hecho no se dan cuenta de que incurren en muchos gastos hormiga y se preguntan a final de mes, cómo es posible que no les quede nada de dinero.

Una vez al mes nos sentamos juntos y vamos anotando los gastos que hemos tenido uno por uno así como nuestros ingresos y hacemos balance: hablamos sobre cómo vamos en nuestras metas a corto, medio y largo plazo, cómo podemos mejorar y nos aseguramos de estar en la misma página.

De esta manera en nuestro matrimonio nunca el dinero ha sido un tema de conflicto ya que los dos, nos aseguramos de estar alineados en nuestro parecer y en nuestras metas.

Para ayudarte en este proceso, en el siguiente enlace, te explico cómo llevar un registro de tus ingresos y gastos, y te incluyo una hoja Excel totalmente gratuita que puedes descargarte para anotarlo. Esa hoja es la que utilizo yo junto con mi esposa para anotar nuestros gastos todos los meses.

2. Reduce tus gastos diferenciando entre lo que necesitas y deseas

Una vez tienes una visión clara de lo que ganas y gastas, podrás empezar a tomar decisiones en cuanto a tus gastos. Las personas frugales, tienen bien claro la diferencia entre lo que quieren y lo que necesitan.

Enfocarte en lo que necesitas y postergar algunas cosas que deseas, es esencial para poder aumentar tu capacidad de ahorro. A veces no significa dejar de hacer las cosas que ya estás haciendo pero sí de hacerlas de manera diferente.

Por ejemplo puedes llevarte un tupper con comida al trabajo en vez de ir al restaurante a comer porque es más cómodo o en vez de comprarte las últimas zapatillas que acaban de salir al mercado, comprarte unas igualmente útiles y con estilo sin gastarte tanta cantidad de dinero.

Algo que también caracteriza a las personas frugales es que no se endeudan y cuando lo hacen es en casos excepcionales como el de adquirir una hipoteca, y en ese caso la pagan rápidamente. Si quieres saber como acelerar el pago de tus deudas, en este artículo te explico como puedes hacerlo paso a paso y aumentar tu capacidad de ahorro.

Hacer esos cambios no resulta fácil pero el hacer esos pequeños sacrificios puede marcar toda la diferencia en tus metas financieras.

3. Busca oportunidades de ahorrar

Las personas frugales son altamente ingeniosas y siempre buscan maneras de obtener un mismo resultado aprovechando sus recursos de la mejor manera posible. Por ejemplo: en vez de ir al supermercado con los precios más caros a comprar porque está más cerca, caminar dos minutos más al supermercado más barato.

Otro ejemplo puede ser el invitar a tus amigos a casa, merendar y pasar un buen rato en vez de salir y cenar fuera.

En mi familia, siempre buscamos las mejores ofertas para comprar comida y reducir gastos. También buscamos oportunidades de inversión que nos puedan dar la mejor rentabilidad manteniendo el riesgo lo más bajo posible. Estos hábitos han marcado un antes y un después en nuestro presupuesto mensual.

Comparar precios de un mismo producto para obtenerlo más barato y estar atento a las oportunidades que se presentan (tanto para reducir gastos como para invertir) son principios sencillos que puedes aplicar en tu vida hoy mismo.

4. Utiliza tu tiempo sabiamente

Una gestión sabia de tus recursos implica no malgastar recursos y cuidar bien de lo que tienes. Entre esos recursos está tu no solamente tu dinero sino tu tiempo, el cual es el recurso más importante en tus manos.

La gestión de tu tiempo es aún más importante ya que es el recurso limitado más importante que dispones. Aprovéchalo como estás haciendo ahora para formarte en tu educación financiera, pasando tiempo de calidad con los que amas, en tu crecimiento personal, en aprender nuevas habilidades, desarrollar talentos… En resumen, en aquello que te va hacer feliz ahora y en el futuro.

Imagina que un banco cada mañana te da 86400€ para gastar y que al final del día independientemente si los gastas o no, te vaciase la cuenta. Imagina que a la mañana siguiente de nuevo depositaría otros 86400€ en tu cuenta. ¿Qué harías? En mi caso, me aseguraría de utilizar esos 86400€ al máximo.

Cada día tenemos 86400 segundos para vivir y no vuelven. Independientemente de si los hemos aprovechado o no, nuestra cuenta queda a cero al final del día. Aprovéchalos bien.

Conclusión

La frugalidad es una cualidad maravillosa e indispensable desarrollar en una sociedad cada vez más consumista. Por supuesto como todo en la vida el exceso es malo. El obsesionarse con los detalles que he mencionado aquí y no disfrutar de lo que tienes no es el objetivo. Es importante disfrutar de los frutos de tus esfuerzos de manera sana y sabia.

El aprender a valorar lo que tienes, cuidarlo bien y aprovechar todas las oportunidades que se presentan a tu alcance tiene un impacto en tus metas financieras.

Aplica estos principios tú mism@ en tu vida y verás la diferencia.

Fuente: https://www.vidaplenayproductiva.com/como-la-frugalidad-puede-ayudarte-a-alcanzar-la-libertad-financiera/